Pasar al contenido principal

Salsa para asados

Este es el famoso gravy inglés, que se hace aprovechando parte de la grasa y el jugo del asado. Sirve para acompañar al roast beef, cerdo asado, pavo, pollo, en incluso caza. La salsa se hace normalmente en la misma fuente del asado, así que se usa una fuente de horno que también se pueda poner directamente al fuego.

Ingredientes

25 g harina (o maicena, 1 cucharada)
500 ml caldo (del tipo adecuado al asado)
  sal y pimienta (pimienta negra, recién molida)
  jugo (el jugo del asado)
2 cda grasa (la grasa que queda en la fuente)

Instrucciones

Pasamos la carne, una vez asada, a una fuente, manteniéndola caliente, y retiramos casi toda la grasa de la fuente de horno, dejando unos 30 ml (2 cucharadas soperas)

Ponemos la fuente al fuego, y rascamos el fondo para soltar el jugo caramelizado. Añadimos la harina y removemos vigorosamente para que se mezcle con la grasa y el jugo del asado, y dejamos que se dore, unos 2 minutos.

Añadimos el caldo, mezclamos, y hervimos a fuego lento, removiendo constantemente, hasta que la salsa espese, y dejamos que se reduzca hasta que tenga la consistencia deseada.

Condimentamos con sal y pimienta recién molida, la colamos, si hiciera falta, y servimos en salsera aparte, al lado de la carne.

Carne de cerdo asada con su salsa de asado.
Rendimiento
500 ml
Tiempo de preparación5
Tiempo de cocción20
Tiempo total
25 minutos

Para hacer una salsa de cebolla asada, asamos 250 g de cebollas, peladas y cortadas en rodajas muy finas, con un poco de aceite a 220º C durante 20 minutos, o hasta que empiecen a dorarse por el borde. Se puede asar la cebolla en el horno al mismo tiempo que el asado principal, en otra repisa.

Utilizamos caldo de verduras como base y condimentamos con 1 cucharadita de azúcar morena, 2 cucharaditas de salsa Worcestershire, 1 cucharadita de mostaza en polvo, sal y pimienta al gusto.

La salsa para asados es un ejemplo de salsas integrales.

Notas

Para darle una textura suave y uniforme, pasar la salsa por el chino, o por un colador de malla mediana, después de añadir sal y pimienta.

Si no tenemos una fuente que pueda ponerse al fuego, podemos usar un cazo, pasando 2 cucharadas de grasa y la mayor cantidad de jugo caramelizado que podamos.

Si el caldo está bien condimentado, la salsa no necesita más, pero también podemos experimentar.

Sugerencias

  • Podemos añadir hierbas al gusto. Por ejemplo, hemos usado un relleno de salvia y cebolla, podemos echar un poco de salvia en la salsa.
  • Podemos añadir un poco de mostaza, o salsa Worcestershire.
  • Podemos añadir un poco de vino, normalmente vino tinto, reduciendo la cantidad de caldo en la misma proporción.
  • Cuando no se cuenta con los jugos caramelizados del asado, un poco de salsa de soja le dará color a la salsa.

Y podemos hacer una versión vegetariana para acompañar a verduras asadas.

Usaremos caldo de pollo para acompañar al pollo asado, y caldo de pavo para un asaso de pavo. Si no se tiene ya hecho, se puede preparar un caldo rápido con los menudillos, el cuello, las alas, y trozos de carne que no se usen. Igualmente, podemos usar huesos y recortes de carne para preparar un caldo de cerdo, vaca, o ternera.

Caldo de pollo

Caldo de menudillos

Caldo oscuro

Si no tenemos más remedio, podemos preparar caldo a partir de un cubito. Y si no tenemos tiempo ni para eso, podemos usar la misma cantidad de cerveza oscura, del tipo inglés, en lugar del caldo. Esta salsa queda bien con vacuno, cerdo, pollo, y pavo.

Origen

Cocina inglesa

Salsa al vino para asados