El café tiene un cierto aire misterioso. La causa de ese misterio puede ser el secreto que rodea sus orígenes y métodos de cultivo iniciales, una vez monopolizados por los árabes de Moka.
El café como aromatizante
(coffea arabica, coffea robusta)
Rubiaceae
El café tiene un sabor ligeramente amargo, aunque pleno y altamente aromático, cuando se hace en infusión, como una bebida, o se añade a postres, helados, salsas, tartas y pasteles para darles su aroma y sabor. El café casi siempre se utiliza para aromatizar platos dulces, aunque también se usa en algunos platos salados.
Datos
La Moka árabe una vez tuvo el monopolio del café. No es que no estuvieran vendiendo café en el extranjero, ya exportaban los granos de café a Europa desde principios del siglo XVII, después de que los viajeros que visitaban el Oriente adquirieron el gusto por el café y lo introdujeron en la Europa continental. En poco tiempo, los emprendedores venecianos llevaron los granos de café a Europa. Sin embargo, los árabes de Moka hacían que los granos fueran incapaces de germinar como medio para retener el control sobre las plantas.
Su posición no duró mucho más de cien años. Los comerciantes holandeses consiguieron pasar de contrabando algunas plantas a Europa, en algún momento del siglo XVII, y desde allí las llevaron a sus colonias. En el siglo XIX, Brasil ya se había convertido en el primer productor de café en el mundo, y todavía lo es.
Cómo se usa
El café se encuentra en grano o molido. También se puede encontrar licor de café, esencia de café o aroma de café concentrado.
El café se debe guardar en un recipiente hermético. Es mejor comprar café en grano y molerlo a medida que se vaya a usar. El café molido se mantiene fresco durante un tiempo más largo cuando se guarda en el frigorífico, en su recipiente hermético o un paquete cerrado.
En la cocina
Cuando se usa como aromatizante, se añade una pequeña cantidad de café ya preparado o de esencia de café. El café liofilizado se puede añadir directamente o preparado con agua caliente, dependiendo de la receta.
En el lado dulce, se puede añadir café a todo tipo de salsas dulces, natillas, flanes y bizcochos.
En el lado dulce, se puede añadir café a todo tipo de salsas dulces, natillas, flanes y bizcochos.
Ingredientes
50 g de café molido
100 gr de azúcar
500-600 ml de agua
1 clara de huevo, batida a punto de nieve
Procedimiento
- Ponemos el agua y el azúcar en un cazo y las llevamos a ebullición. Dejamos que hiervan 5-6 minutos para hacer un almíbar ligero.
- Echamos el café molido en el almíbar y retiramos el cazo del fuego. Dejamos el café en infusión durante 10 minutos.
- Pasado ese tiempo, colamos el almíbar para eliminar el café molido y dejamos que se enfríe.
- Una vez a tempeatura ambiente, lo pasamos a bandejas de hielo y lo metemos en el congelador durante una hora, o hasta que esté medio congelado.
- Sacamos el granizado de café medio congelado, lo batimos para romper los cristales de hielo, e incorporamos la clara batida a punto de nieve.
- Lo volvemos a poner en las bandejas de hielo y lo metemos otra vez en el congelador varias horas, hasta que termine de congelarse.
- Sacamos el granizado de café del congelador 20 minutos antes de servirlo, para que se ablande.
Equivalencias - Se peude sustituir 1 taza de café en infusión por:
- 1 taza de agua hirviendo + 2 cucharaditas de café instantáneo.
- 1 taza de achicoria en infusión.
Como aromatizante, 3 cucharadas de café se pueden sustituir por:
- 3 cucharadas de brebaje de achicoria.
- 3 cucharads de licor de café, ya sea kahlua, crema de café o Tía María.
- 1 cucharada de esencia de café.