Merienda
Se hace entre la comida, o almuerzo, y la cena. Hay muchas opciones para satisfacer el apetito a la hora de merendar.
Bolsillos de pan pita
Se pueden hacer sándwiches realmente deliciosos con pan pita. Una vez que se abren, se pueden rellenar con casi cualquier cosa que nos guste.
Muffins de jamón y queso
Estos muffins salados son magníficos para llevar de excursión, para picar entre comidas, como comida ligera, acompañados de una ensalada sustanciosa, o como tapas.
Bizcocho borracho
Un bizcocho suave y esponjoso mojado en un almíbar hecho con brandy o ron.
Croissants
Los croissants caseros, recién horneados, son una verdadera hazaña de repostería. Se trata de un proyecto ambicioso, pero el resultado final lo vale.
Copa de fruta y yogur
Estas copas de fruta y yogur pueden servirse como desayuno, postre o merienda. Son muy simples de preparar pero su presentación es elegante.
Roscón de reyes
Un bollo de forma ovalada decorado con azúcar y fruta confitada que se sirve particularmente durante la fiesta de la Epifanía, los días 5 y 6 de enero. Suele contener una sorpresa.
Comistrajo al chocolate
Una mezcla de cereales, nueces y frutos secos cubiertos con chocolate.
Huesos de santo
Aunque el nombre puede sonar un poco macabro, los huesos de santo son en realidad una deliciosa combinación de mazapán y relleno dulce. Su forma recuerda a un trozo de los huesos largos.
Jalea de menta
La jalea de menta es una receta fácil, ideal para principiantes en el arte de las conservas caseras.
Sobaos
Bizcochos esponjosos con harina, azúcar, mantequilla y huevo típicos de la comarca del Pas en Cantabria.
Desayunos sobre la marcha
Cuando los días son caóticos y no hay mucho tiempo antes de salir de casa, dejar que los niños coman en el coche es la única forma de llegar a tiempo.
Meriendas saludables
La mayoría de los niños y adolescentes van directamente a la cocina a comer algo en cuanto llegan a casa del colegio.