Pasar al contenido principal

Cómo describir el aroma

El olor es tan importante como el sabor, sino más, a la hora de disfrutar de la comida y de descubrir nuevas recetas. Normalmente el aroma llega a la nariz antes de que nos llevemos el primer bocado a la boca y podamos probar la comida. El sentido del olfato nos permite explorar un plato antes de que podamos probarlo.

Describir aromas

Disfrutar un plato es una experiencia que involucra varios de los sentidos y como sólo tenemos un número limitado de palabras para expresar las múltiples sensaciones que experimentamos, describir los aromas puede parecer difícil. Sin embargo, la mayoría de los adjetivos pueden agruparse bajo dos encabezados, huele bien o huele mal. Cualquier alimento nutritivo suele resultarnos apetitoso, sabe bien y huele bien. Mientras que los alimentos perjudiciales suelen tener un sabor y un olor desagradables. A menudo, el mal olor es un signo de que la comida se ha estropeado.

Si un plato no huele a nada, resultará aburrido, y si el aroma de un alimento es desagradable, definitivamente no deberíamos comerlo. Si huele bien, si el aroma es apetitoso, probablemente será un placer probarlo y disfrutaremos de la comida. Así que…

¿Cómo huele?

Ácido - Se refiere a un olor que es agudo, penetrante y a menudo asociado con alimentos o líquidos que tienen un alto contenido de acidez.  

En el contexto de la comida, un olor ácido podría estar asociado con alimentos fermentados como el chucrut o el kimchi, o con frutas cítricas como el limón o la lima. También podría referirse al olor de los productos lácteos agrios, como la leche agria o el yogur.

En el caso del vino, un olor ácido puede ser un indicativo de acidez alta, y puede asociarse con olores a frutas cítricas, manzana verde, o incluso con un olor a vinagre en caso de que el vino se haya estropeado.

Un olor ácido no es necesariamente algo malo. En muchos casos, la acidez puede agregar complejidad y equilibrio a la comida y al vino. Sin embargo, un olor ácido fuerte e inesperado puede ser una señal de que algo está mal o se ha echado a perder.Ejemplo: El olor ácido del vinagre era muy fuerte. 

Acre - Picante y amargo. La  comida puede adquirir esta cualidad cuando se cocina con fuego de leña.

Afrutado - Se refiere a un aroma que recuerda a las frutas. Este aroma puede ser similar al de las frutas frescas, como manzanas, peras, uvas, melocotones, cítricos, o incluso frutas tropicales como el mango o la piña. También puede recordar a frutas secas, como pasas o higos.

El término "afrutado" se usa comúnmente en la descripción de vinos, ya que muchos vinos tienen notas de diversos tipos de frutas en su aroma y sabor. Por ejemplo, puedes decir: "Este vino tiene un aroma afrutado con notas de cerezas y frambuesas".

En el caso de la comida, el término "afrutado" puede usarse para describir cualquier cosa desde una salsa con sabor a fruta hasta el ligero aroma a manzana de un pastel de manzana recién horneado.

Es importante tener en cuenta que el término "afrutado" es muy general y puede abarcar una amplia gama de olores específicos. Por lo tanto, a menudo se especifica el tipo de fruta para proporcionar una descripción más precisa. Por ejemplo, en lugar de simplemente decir "olor afrutado", puedes decir "olor a manzana verde" o "olor a frutos rojos".

Agrio - Se refiere a un aroma que es ácido, similar al de la comida fermentada o estropeada. Este término a menudo implica un olor que es desagradable o que te resulta repulsivo, aunque en ciertos contextos, un aroma agrio puede ser deseado o incluso considerado positivo.

En los alimentos, un olor agrio podría indicar que la comida está en mal estado, como la leche que se ha vuelto mala o la carne que ya no está en buenas condiciones. Sin embargo, también hay alimentos que son intencionalmente agrios y emiten este tipo de olor como parte de su atractivo, como ciertos tipos de queso, pan de masa fermentada o alimentos fermentados como el chucrut o el kimchi.

En el contexto del vino, un olor agrio puede ser una señal de que el vino tiene un defecto, como un olor a vinagre que indica la presencia de ácido acético, lo que podría significar que el vino se ha convertido en vinagre. Sin embargo, ciertos vinos pueden tener un aroma agrio o ácido como parte de su perfil, especialmente si son altos en ciertos tipos de acidez.

En cualquier caso, describir un olor como "agrio" generalmente sugiere un notable nivel de acidez, y si se considera algo bueno o malo puede depender en gran medida del contexto específico.

Ambrosía - Huele divino, de olor dulce, fragante, aromático.

Acorchado - Olor a corcho, un aroma fofo y blando como el del corcho.

Ahumado - Es un adjetivo que se usa a menudo para describir olores o sabores que recuerdan al humo. Este término es comúnmente usado en la descripción de alimentos y bebidas que han sido tratados o preparados de alguna forma con humo.

En el caso de los alimentos, "ahumado" puede referirse a carnes, pescados o quesos que han sido literalmente ahumados como parte de su proceso de cocción o curación. Por ejemplo, el jamón ahumado o el salmón ahumado tienen un aroma característico que recuerda al humo de madera.

En el mundo del vino, el término "ahumado" puede usarse para describir ciertas notas olfativas que recuerdan al olor del humo, a veces debido a la forma en que se ha procesado el vino. Por ejemplo, algunos vinos pueden tener un toque ahumado debido a su envejecimiento en barricas de roble tostado.

El aroma ahumado generalmente se asocia con notas de madera quemada, tabaco, o incluso café tostado, dependiendo del grado y la naturaleza del aroma ahumado. Es un término bastante amplio y puede variar significativamente en su intensidad y características.

Amargo - El amargor generalmente se asocia más con el gusto que con el olor. Sin embargo, en el contexto de la descripción de alimentos o vinos, este término puede utilizarse para sugerir la presencia de ciertos elementos o notas que se asocian generalmente con sabores amargos.

Por ejemplo, en el caso del vino, un aroma que sugiere taninos (compuestos presentes en la piel de las uvas y en el roble de las barricas de vino) puede describirse como amargo, ya que los taninos suelen aportar una sensación de amargor al sabor del vino.

En la comida, un aroma "amargo" podría ser aquel que evoca ingredientes o elementos que tienen un sabor amargo, como ciertas verduras (la rúcula o la endibia), el cacao puro, o el café negro.

Aromático - Perfumado, fragante, de olor dulce o picante pero generalmente agradable. No carece de olor.

Balsámico - Tiene la fragancia agradable del bálsamo aromático, es suave, apacible, y no es picante en absoluto.

Caprino - Un olor cabruno, huele a cabra. Probablemente es un olor fuerte y no demasiado agradable.

Caramelo - Se refiere a un aroma dulce, a menudo rico y ligeramente tostado, similar al del caramelo que se obtiene al calentar el azúcar. Un olor a caramelo puede aportar notas de dulzura y complejidad a la experiencia general de degustar comida o vino.

En la comida, puedes encontrar este aroma en los postres que contienen caramelo, o en platos salados que han sido caramelizados por la cocción a alta temperatura, como ciertos cortes de carne o verduras asadas.

En el caso del vino, el olor a caramelo puede indicar la presencia de ciertos compuestos que se desarrollan durante el proceso de envejecimiento, especialmente en vinos que han sido envejecidos en barricas de roble. Este aroma también puede ser más prominente en ciertos vinos dulces o fortificados.

Cítrico - Se refiere a un aroma que recuerda a los cítricos, como las naranjas, los limones, las limas, o las mandarinas. Este olor es a menudo fresco, ácido, y un poco dulce, similar a la fragancia que se obtiene al cortar o exprimir estas frutas.

En la comida, un olor cítrico podría ser notado en platos que incorporan cítricos, como un pollo al limón o una ensalada con aderezo de vinagre y limón.

En el vino, un olor cítrico es común en ciertos vinos blancos, que a menudo tienen aromas que recuerdan a las frutas cítricas. Por ejemplo, un Sauvignon Blanc puede tener notas de lima y pomelo, mientras que un Chardonnay puede tener toques de limón o manzana verde.

La palabra "cítrico" se refiere a una categoría general de olores, y puede haber variaciones significativas dentro de esta categoría. Por ejemplo, el olor a naranja es más dulce y menos ácido que el olor a limón o lima. Sin embargo, todos estos olores podrían ser descritos como "cítricos".

Delicado - Sutil, elusivo, fino, suave, tentador, refinado, selecto, escogido, sibarita, inalcanzable, apetitoso, tenue, de buen gusto. Nunca es abrumador ni duro; no es áspero,  ordinario, vulgar, o tosco.

Dulce - Generalmente se refiere a un aroma que evoca sensaciones asociadas con azúcares, miel, frutas dulces, caramelos, chocolate, vainilla, entre otros.

En el caso del vino, un olor dulce puede sugerir la presencia de frutas maduras, miel, vainilla, caramelo o incluso chocolate, dependiendo del tipo de vino. Por ejemplo, algunos vinos tintos dulces pueden tener un aroma a frutas rojas maduras o a chocolate, mientras que algunos vinos blancos dulces pueden tener notas de manzana dulce, miel o melón.

En cuanto a la comida, un olor dulce puede ser el aroma de un postre horneado, como una tarta de manzana, un pastel de chocolate, o incluso un plato principal que tiene ingredientes dulces, como una salsa agridulce o un glaseado de miel.

Es importante notar que "dulce" en este contexto no significa necesariamente que el vino o la comida tengan un sabor dulce. A veces, un vino o comida pueden tener un olor dulce, pero un sabor diferente.

Embriagador - Atractivo, atrayente, cautivador, seductor, bueno. Uno se siente embriagado solamente con el aroma.

Empalagoso - Excesivamente dulce, generoso en exceso, acaramelado, edulcorado, se hace pesado. - No es ligero ni suave.

Especiado, especias - Se refiere a un aroma que evoca una o más especias en particular. Puede ser un olor pungente, picante, cálido, dulce o incluso amargo, dependiendo de las especias a las que se parezca.

Por ejemplo, en el contexto de la comida, un curry puede tener un olor a especias gracias a ingredientes como el comino, la cúrcuma, el cilantro y el chile. Este tipo de olor puede ser intenso y evocar una sensación de calor.

En el caso del vino, un olor a especias puede ser menos obvio, pero no menos complejo. Un vino tinto robusto, por ejemplo, podría tener un olor a especias que recuerde a la pimienta negra, al clavo de olor o a la canela.

En ambos casos, un "olor a especias" sugiere una cierta profundidad y complejidad de aroma. Esto puede contribuir a la sensación general de sabor y disfrute al consumir el alimento o la bebida.

Fétido – Pestilente, hediondo, apestoso, el olor nauseabundo de la materia orgánica en descomposición,  maloliente, repugnante, viciado, rancio, cargado, inmundo - No huele limpio y fresco, y ciertamente no despierta el apetito.

Fermentación, fermentado - Se refiere al aroma que se produce durante el proceso de fermentación, que es la descomposición anaeróbica (sin oxígeno) de sustancias orgánicas por microorganismos como las bacterias y las levaduras.

En el contexto de la comida y el vino, la fermentación es un proceso crucial que puede dar lugar a una amplia variedad de sabores y olores. Dependiendo de lo que se esté fermentando, un olor fermentado puede variar ampliamente. Algunos olores fermentados pueden ser fuertes, agrios, o incluso a veces descritos como "podridos". Sin embargo, otros pueden ser más dulces, suaves, o ricos.

Por ejemplo, en el caso del vino, un olor fermentado puede incluir aromas frutales, florales, o incluso especiados dependiendo del tipo de uva y las condiciones de fermentación. Otros alimentos fermentados como el kimchi o el chucrut pueden tener un olor fuerte y agrio, mientras que alimentos como el yogur tienen un olor fermentado más suave y lácteo.

Es importante destacar que, aunque la palabra "fermentado" frecuentemente tiene una connotación negativa en términos generales, en el mundo de la comida y el vino, un olor a fermentación a menudo es deseado y apreciado, ya que indica la presencia de sabores complejos y profundos.

Floral - Generalmente se refiere a un olor que evoca al de las flores o que tiene características similares al olor de las flores. Este es un término comúnmente utilizado en la cata de vinos para describir vinos que tienen un aroma similar a las flores, como las rosas, el jazmín, la flor de naranjo, entre otros.

Por ejemplo, en los vinos blancos, como el Gewürztraminer o el Viognier, se pueden detectar notas florales en la nariz. Estos vinos a menudo se describen como teniendo aromas a rosas, flores blancas o flor de naranjo.

En la comida, un aroma floral podría venir de los ingredientes que naturalmente tienen un olor a flores, como la lavanda, la rosa, la flor de saúco o ciertos tipos de miel.

Fragante o perfumado son similares – Son términos generalmente positivos que se utilizan indistintamente. Un plato fragrante, o perfumado, es oloroso, despide un aroma agradable que abre el apetito, tiene un olor dulce y balsámico – Se trata de lo opuesto a maloliente o algo sin aroma alguno.

Fresco – El aroma es agradable, limpio, claro, refrescante, dulce y nuevo, joven, recién hecho, natural, puro. Es como el aroma natural de las frutas o verduras recién cogidas, y puede ser caliente como el aroma del café recién hecho o del pan recién salido del horno - No huele a algo pasado,  con moho, rancio o peor.

Fuerte - Se refiere a un aroma que es particularmente intenso, penetrante o potente. Este tipo de olor es inmediatamente notable y puede llenar rápidamente un espacio. Por ejemplo, en los alimentos, los ingredientes como el ajo, la cebolla, el queso azul o el pescado pueden producir olores fuertes.

En el caso del vino, un "olor fuerte" puede referirse a la presencia intensa y dominante de ciertos aromas, como frutas maduras, especias, madera, etc. Sin embargo, también podría indicar la presencia de aromas indeseables o fuera de lugar en el vino, como olores a vinagre o azufre, que podrían sugerir un defecto en el vino.

Aunque los olores fuertes pueden ser intensos y sorprendentes, no son necesariamente negativos. Muchos alimentos y vinos son apreciados precisamente por sus olores fuertes y característicos. Sin embargo, si un olor es demasiado fuerte hasta el punto de ser desagradable, puede ser una señal de que algo está mal, especialmente en el caso del vino.

Inodoro – Algo que no tiene olor. No resulta una buena palabra para describir el aroma de una comida porque también se utiliza este término para referirise al escusado.

Hebáceo, hierba - Se refiere a los olores que recuerdan a plantas verdes, hierba recién cortada o el de las hojas verdes. Este tipo de aroma es a menudo fresco, ligero y natural.

En el contexto de la comida, un olor herbáceo podría estar asociado con alimentos que contienen hierbas frescas como el cilantro, el perejil o el eneldo. Algunos vegetales verdes, como los espárragos o las judías verdes, también pueden tener un olor herbáceo.

Cuando hablamos de vinos, especialmente los vinos blancos, el término "herbáceo" se utiliza a menudo para describir aromas que recuerdan a hierbas frescas, como el hinojo o la hierba recién cortada, o incluso vegetales verdes. Por ejemplo, el vino de la uva Sauvignon Blanc es conocido por tener notas herbáceas, que pueden recordar a hierbas como el pimiento verde o el espárrago.

Este tipo de aroma puede añadir una dimensión de frescura y complejidad a la comida o al vino, y es una característica apreciada en muchos casos. Sin embargo, en el vino, un aroma excesivamente herbáceo puede ser señal de una uva que no ha madurado completamente.

Leñoso - Se puede usar para describir los aromas que recuerdan a la madera, ya sea madera fresca o madera seca y curada, como el cedro, el roble, el pino, etc. Este olor es común en los vinos que han sido añejados en barricas de roble, ya que el vino absorbe los sabores de la madera durante este proceso. Por ejemplo, muchos vinos Cabernet Sauvignon y Chardonnay que maduran en barrica presentan un olor leñoso. En los alimentos, ciertos tipos de ahumados pueden impartir un olor leñoso.

Madera - Se refiere a las notas olfativas que recuerdan a la madera, como el roble, el cedro o la madera de pino. Este tipo de aroma se encuentra a menudo en vinos que han sido envejecidos en barricas de madera, especialmente de roble.

El olor a madera puede variar dependiendo del tipo de madera y el proceso de envejecimiento. Puede ser sutil y agregar un toque de especias, vainilla, coco o caramelo al aroma general del vino, o puede ser fuerte y dominante si el vino ha sido envejecido durante mucho tiempo en madera nueva.

En el caso de los alimentos, el olor a madera puede provenir de la cocción o ahumado con madera. Por ejemplo, el salmón ahumado en madera de cedro puede tener un aroma maderoso.

Es importante destacar que este tipo de aroma es altamente valorado en ciertos vinos y alimentos, ya que puede agregar una complejidad adicional y mejorar la experiencia sensorial general. Sin embargo, un aroma maderoso demasiado fuerte puede ser menos deseable, ya que puede enmascarar otros aromas y sabores.

Maloliente – Huele mal, lo dice la palabra. Tiene un olor desagradable.

Miel - Tiene una fragancia dulce, suave y ligeramente floral que recuerda a la miel. Este aroma puede ser rico y un poco cremoso, e incluso puede tener notas de flores o frutas, dependiendo del tipo de miel que se evoca. Se utiliza para describir vinos y alimentos que tienen un aroma similar a la miel, no necesariamente aquellos que contienen miel como ingrediente.

En la comida, a menudo se usa para describir postres, salsas o glaseados que contienen miel. También puede usarse para describir el aroma de ciertos tipos de panes o galletas que llevan miel en su receta.

En el vino, un "olor a miel" es una descripción bastante común para ciertos vinos blancos dulces, como el Sauternes o algunos vinos de hielo. Este aroma puede ser el resultado de la concentración de azúcares durante el proceso de vinificación. En algunos vinos añejos o de postre, un "olor a miel" puede ser una señal de ciertos procesos de envejecimiento o maduración.

Nueces y otros frutos secos - Se trata de un aroma que recuerda a las nueces, y esto es aplicable a otros frutos secos. El aroma puede variar desde una dulzura suave y mantecosa como la que se encuentra en las nueces de macadamia hasta un aroma tostado o terroso como el que se podría encontrar en las nueces tostadas o las almendras.

Por ejemplo, en el caso de los vinos, especialmente los blancos como el Chardonnay que han pasado por un proceso de fermentación en barrica, a veces se pueden detectar aromas que recuerdan a la avellana o la almendra. Este aroma es parte de la complejidad que puede adquirir el vino durante su proceso de elaboración y envejecimiento.

En el caso de los alimentos, varios quesos, panes y postres pueden tener un olor a almendra, nuez o avellanas. Este aroma puede ser natural del ingrediente principal o puede ser el resultado de un proceso de cocción o tostado.

Picante  - En términos generales, si un olor es descrito como "picante", puedes esperar que sea fuerte, notable, y posiblemente un poco agudo o penetrante, pero puede tener varias interpretaciones.

Pûede ser picante como los olores fuertes y penetrantes que provienen de ciertas especias, condimentos o alimentos fuertes. Por ejemplo, el ajo, la cebolla, el jengibre, el rábano picante, y ciertos tipos de chiles pueden tener olores que se describen como picantes. Este tipo de olor es inmediatamente notable y puede incluso causar una sensación física en la nariz, similar a como los alimentos picantes pueden causar una sensación de calor en la boca.

Picante también puede referirse a un olor agudo o penetrante, uno que es fuerte y notable, pero no necesariamente relacionado con las especias. En el contexto del vino, un aroma picante puede ser intenso y estimulante, a veces incluso un poco agresivo.

Rancio – Algo que huele rancio tiene el olor de la grasa pasada, oxidada, huele a viejo. No tiene un aroma fresco.

Reconfortante  – Un aroma agradable, que nos hace sentir bien, es cordial y reparador, tónico, vivificante. No está vacío ni resulta desolador.

Salado, salino - La sal en sí misma no tiene un aroma perceptible y el término salado se usa para describir el sabor, no el aroma. 

No obstante, en el contexto de la comida, cuando se menciona "olor salado", suele referirse a los aromas asociados con alimentos salados. Por ejemplo, el aroma de las patatas fritas, el bacalao salado o las anchoas podría describirse como "olor salado". Este aroma evoca la expectativa de un sabor salado.

En cuanto al vino, los olores y sabores "salados" son menos comunes y podrían encontrarse en vinos producidos en regiones costeras, donde los viñedos están influenciados por la brisa marina. En estos casos, podríamos hablar de notas minerales o de un matiz salino, pero no tanto de un "olor salado" per se.

Suave - Es un aroma que no es fuerte, sobrecogedor o intenso, suele referirse a un olor que es sutil, ligero y a menudo agradable.

El término no necesariamente indica si el olor es bueno o malo, sino que se refiere a su intensidad. Incluso un olor desagradable puede ser suave si no es muy fuerte. Sin embargo, en el uso general, un olor suave a menudo se aplica a un aroma que es ligeramente agradable y no demasiado potente.

Por ejemplo, el aroma de la ropa recién lavada o un toque de vainilla en una habitación se podría describir como un olor suave. Del mismo modo, una fragancia que no es demasiado dulce, picante o aguda puede ser referida como un olor suave. Es un aroma que es perceptible, pero no abruma los sentidos.

Terroso, tierra - Suele ser un aroma que recuerda a la tierra o al suelo. Este término se utiliza a menudo para describir olores que son robustos, ricos y naturales, similares al olor del suelo húmedo, de hojas caídas, de madera o incluso de hongos.

En el contexto del vino, un olor terroso puede ser el resultado de varios factores, incluyendo las características del suelo en el que se cultivaron las uvas, el proceso de vinificación, o incluso la variedad de uva específica. Algunos vinos, especialmente ciertos tipos de vinos tintos como los de la región de Borgoña en Francia, son conocidos por tener notas terrosas.

En cuanto a la comida, términos como "olor terroso" se utilizan a menudo para describir alimentos como las remolachas, las patatas, los hongos y ciertas variedades de queso o nueces. Estos alimentos tienen un olor distintivo que puede recordar a la tierra o al suelo, a menudo en una forma rica y satisfactoria.

Tostado - Suele ser un aroma que evoca la sensación de algo que ha sido cocinado hasta que dora. Este proceso de cocción intensifica los sabores y produce una gama de aromas que pueden recordar a pan tostado, café tostado, frutos secos tostados o incluso chocolate.

En el vino, un olor a tostado puede ser el resultado de la fermentación o el envejecimiento en barricas de roble tostado. Los vinos que se envejecen en barricas de roble pueden adquirir notas de vainilla, caramelo, café e incluso coco, todas las cuales pueden describirse como "tostadas".

En la comida, un olor a tostado podría venir de granos tostados, como en el café, o de pan tostado. También puedes encontrar olores tostados en ciertos tipos de cerveza, como las stouts y porters, que utilizan maltas tostadas que proporcionan notas de cacao y café.

Vainilla - Se refiere a un aroma que se asemeja al de la vainilla, una especia popular obtenida de las vainas de la orquídea de vainilla. Este olor es generalmente dulce, cálido, y ligeramente cremoso.

En el contexto de la comida, muchos postres y dulces tienen un olor a vainilla, especialmente si usan vainilla en su receta.

En el vino, el olor a vainilla puede estar presente debido a varios factores. Algunos vinos, especialmente los que se han envejecido en barricas de roble, pueden adquirir un olor a vainilla. Esto se debe a que el roble contiene un compuesto llamado vainillina, que aporta este aroma al vino.

Un ejemplo de cómo usarlo en una frase sería: "El vino tinto tiene un olor a vainilla complejo debido a su envejecimiento en barricas de roble."

Una mujer apreciando el aroma de la comida que está cocinando.