La cocina de Luisiana

Cocina criolla, cocina cajún y la cocina del sur.

En Luisiana se captura marisco. Se cría ganado y aves, que a su vez producen leche y huevo de los cuales btienen diversos productos derivados. Se cultivan soja, caña de azúcar y arroz. Entre los otros productos agrícolas se encuentran los pimientos rojos y los ajos; y la caza de temporada.

Los mariscos locales, como las ostras, el cangrejo de río y las gambas son muy abundantes y aparecen en todos los estilos de cocina que florecen en la región.

La industria alimentaria es importante. Una muestra es la salsa de Tabasco, un producto conocido a nivel mundial. Esta salsa hecha con chiles picantes se desarrolló en Avery Island. La salsa lleva el nombre del río y la ciudad en el sur de México de donde se trajeron los chilles originalmente.

La comida y la bebida

La carne de res, el bagre, el cerdo a la barbacoa y el cangrejo de río son cuatro de los alimentos más populares en el estado, aparte de la región de Acadiana. Los bombones praliné son los dulces favoritos.

La cerveza es la bebida favorita. También son populares los daiquiris. Las tiendas de daiquiris, en las que se pide un daiquiri, con alcohol, sin salir del coche se encuentran en todo el estado.

La cocina del norte de Luisiana es mucho más parecida a las cocinas de Mississippi y Alabama que a la cocina del sur del estado, en la cual se aprecia vivamente la influencia francesa, y también la española.

El sur de Luisiana es el hogar de los criollos, los descendientes de los colonos franceses y españoles, quienes llegaron primero, así como los descendientes de los colonos franceses de la región de Acadia, en el este de Canadá, llamados cajunes. Tanto los criollos como los cajunes tienen sus propios estilos de cocina. Los platos típicos criollos incluyen guisos picantes servidos con arroz, como el gumbo y la jambalaya. Entre los platos típicos de la cocina cajún se encuentran las alubias moradas con arroz y el boudin, que es una salchicha picante.

Nueva Orleans

Nueva Orleans es una ciudad amante de las fiestas. Allí se celebra anualmente el Mardi Gras, una especie de carnaval, y muchos festivales y conmemoraciones. La mayoría están relacionados con la música y el arte, aunque también hay festivales franceses y griegos. Donde hay una buena fiesta, siempre hay comida y bebida, y puede ser una buena oportunidad para probar algo nuevo.

La mala comida es algo que no cae bien en Nueva Orleans. No hay que preocuparse, ya que hay muchas cosas buenas para comer, y mucha variedad. Entre los bocadillos se debe probar la muffuleta, con una buena cantidad de ensalada con aceitunas y carne dentro de un pan de sésamo de buen tamaño, y el po'boy, un bocadillo que puede llevar cualquier tipo de relleno, desde carne asada a ostras y cangrejo de río, pasando por la salchicha local, en un una baguette. Y también están los perritos calientes ue se pueden comprar en los puestos ambulantes.

Un dressed po'boy tiene mayonesa, lechuga y tomate además del relleno principal.

gumbo