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Tortitas de puré

Una guarnición capaz de resaltar cualquier plato, además de ser una forma rápida y fácil para aprovechar restos de puré de patatas, si es que sobra algo, y los purés de otras hortalizas o tubérculos.

Ingredientes

400 g puré de patata (o una mezcla, puré cremoso y espeso)
250 g cebollas (cocinadas)
1 huevo (opcional, batido)
  harina (opcional)
  sal y pimienta (al gusto)
  aceite (para freír)
  queso rallado (optativo, si se hacen en el horno)

Instrucciones

Preparamos las tortitas

Mezclamos el puré de patata y las cebollas para hacer una masa. Rectificamos la sazón.

Con las manos enharinadas, formamos bolitas de puré, que luego aplastamos lieramente.

Las freímos en sartén

En una sartén, calentamos suficiente aceite como para que cubra hasta la mitad de la tortita de puré.

Pasamos las tortitas por harina y las freímos, de una en una o de dos en dos, dependiendo del tamaño, hasta que estén bien doradas, 1-2 minutos por cada lado.

O las cocemos en el horno

Ponemos las tortitas en una bandeja para galletas ligeramente engrasada y las pintamos con huevo batido o las espolvoreamos con queso rallado.

Calentamos el horno de 180º C a 200º C, metemos la bandeja en el horno, y las dejamos hasta que estén subidas y doradas, 25-30 minutos.

Servimos

Calientes. Sólas o con una salsa, por ejemplo, salsa de tomate, aparte, en salsera.

Rendimiento
4 raciones
Tiempo de preparación15
Tiempo de cocción30
Tiempo total
45 minutos

Notas

Si se trata de un puré de patatas cremoso, que ya tiene mantequilla, no hará falta ligarlo con huevo para hacer tortitas, ya que al enfriarse se le podrá dar forma fácilmente y se mantendrá unido.

Las cebollas pueden estar picadas y fritas, o asadas en rodajas finas y luego en tiras.

Conviene que las tortitas no sean demasiado grandes para poderlas manejar fácilmente, especialmente cuando se fríen en la sartén. Una cucharada sopera colmada es una buena medida.

Variaciones

Como base, puede utilizarse simplemente puré de patatas, sólo o condimentado, o cualquier mezcla que tengamos disponible. Se pueden hacer con un puré de patata y zanahoria; puré de patata y nabo sueco; o puré de patata, zanahoria y nabo sueco; aunque es conveniente que haya mayor proporción de patata que de las otras hortalizas para que se le pueda dar forma. Y podría ser un puré de patatas al queso, al que se le ha incorporado un poco de queso rallado, puré de patatas con ajo, y otros sabores.

En lugar de cebolla frita, podrían utilizarse cualqueir tipo de hortaliza o verdura ya cocinada, más o menos picadas. No importa si están cocidas, fritas o asadas. Pueden hacerse tortitas con puerros hervidos, picaditos; pimientos asados, sin piel y picados; o espinacas cocidas, muy bien escurridas y picadas; igualmente podrían hacerse con brócoli o coles de bruselas, y así se podrían aprovechar dos tipos de sobras.

Pueden añadirse tropezones al puré de patata. Por ejemplo, jamón picadito y rehogado con la cebolla, huevo duro, bacalao desalado y desmigado, espinacas cocidas y muchas más.

Origen

Cocina internacional