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Falafel

El falafel es un plato icónico de la cocina mediterránea y del Medio Oriente. Se trata de pequeñas bolas o croquetas fritas elaboradas a base de garbanzos o habas, condimentadas con una mezcla de hierbas y especias que les otorga un sabor increíblemente aromático y una textura crujiente por fuera pero tierna por dentro. Por lo general, se sirven en pan pita o en ensaladas, acompañados de salsas como el tahini o el yogur.

Ingredientes

2 tz garbanzos (ya cocidos o escurridos)
1 cebolla (grande, pelada y picada)
3 di ajo (pelados y picados)
1⁄2 tall perejil (perejil fresco picado)
1⁄4 tz cilantro (cilantro fresco picado)
1 cdta comino (comino molido)
1 pzca pimienta de cayena (o al gusto)
1 cdta sal (o al gusto)
1 cdta bicarbonato
  aceite vegetal (para freír)

Instrucciones

Ponemos los garbanzos, cebolla, ajo, perejil, cilantro, comino, pimienta de cayen y la sal en el robot de cocina. Procesamos la mezcla hasta obtener una pasta homogénea. Pasamos la pasta de garbanzo a un cuenco e incorporamos el bicarbonato.

Con las manos ligeramente mojadas, formamos bolas del tamaño de una nuez con la pasta de garbanzos. Las vamos poniendo en una bandeja.

Calentamos suficiente aceite vegetal en una sartén honda a fuego medio-alto. Cuando esté caliente, freímos las bolas de falafel, por tandas, hasta que estén doradas y crujientes, unos 3-4 minutos por lado. Pasamos los falafel fritos por papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Los servimos calientes.

Un plato con varios falafel, uno de ellos cortado por la mitad y mostrando el interior.
Rendimiento
4 raciones
Tiempo de preparación10
Tiempo de cocción20
Tiempo total
30 minutos

Notas

Se necesita 1 taza de garbanzos secos para obtener 2 tazas de garbanzos cocidos. Habrá que remojar y cocer los garbanzos primero,  escurriéndolos después. Si se trata de garbanzos de lata, habrá que enjuagarlos y escurrirlos bien.

Se usa una espumadera para darles la vuelta con cuidado al falafel.

Los falafel se sirven en pan pita o en ensalada. Se acompañan con tahini, salsa de yogur con ajo, tomate, lechuga y pepinillos en rodajas.

Se puede encontrar una mezcla en polvo para hacer falafels en algunos supermercados y tiendas especializadas. Basta añadirle agua. Para darles más textura, se pueden añadir otros ingredientes a la mezcla como cebolla o perejil picados. Si se añade un poco de trigo bulgur y se deja reposar la mezlca 1-2 horas en la nevera, después de haber añadido el agua, la textura mejora.

Horno

Los falafel se pueden hornear en vez de freírlos. Para hacerlo, se colocan en una bandeja de horno engrasada con aceite y se cocinan a 200º C 20-25 minutos, dándoles la vuelta a la mitad del tiempo de cocción.

Freídora de aire

Los falafels se pueden cocinar en una freidora de aire. Se calienta a 200ºC y se colocan en la cesta en una sola capa. Los falafels se cocinan 10-12 minutos, dándoles la vuelta a la mitad. Para que queden más crujientes, la cesta se puede pintar con aceite vegetal. Otra opción es pintar los falafels con un aceite. También se podría usar un pulverizador de aceit.

Variaciones

Se peude experimentar con los condimentos. El cilantro fresco y el perejil son tradicionales, pero se pueden añadir otras hierbas y especias, incluso chiles picados a la mezcla para darle un toque picante.

Se pueden hacer falafel con habas en lugar de garbanzos para una variante tradicional.

Para hacer falafel de espinacas, se incorpora espinacas o acelgas cocidas y escurridas a la pasta de garbanzos.

Salsas para acompañar

Salsa de tahini y limón: Pra hacer una salsa rápida para acompañar los falafels, se mezclan 75-80 ml de agua, 2-3 cucharadas colmadas de pasta de tahini, 75-80 ml de zumo de limón y 2 dientes de ajo, rallados o finamente picados.

Salsa de yogur: Se mezclan 175-180 ml de yogur; 1 pepino pequeño, pelado y rallado; 1 diente de ajo, pelado, rallado o finamente picado; 1 cucharada de hojas de menta finamente picadas; 1 cucharada de zumo de limón.

Origen

Cocina de Oriente Medio

El l falafel tiene sus raíces en la cocina de Oriente Medio y el Mediterráneo. Varios países se disputan su origen, incluyendo Egipto, Líbano, Israel y Palestina. Tradicionalmente, se cree que se hacía con habas, pero con el tiempo, los garbanzos se convirtieron en la base más común para su preparación.